Debido a la propagación del coronavirus y con el objetivo de resguardar la salud de los trabajadores, colaboradores, familiares y la comunidad en general, CMP implementó una modalidad de trabajo en grupos reducidos, llamado también en células.
Esta condicional forma de operar es desarrollada a través de la formación de 105 grupos, compuestos por un máximo de cinco trabajadores cada uno, aplicándose tanto para el personal propio como colaborador.
Al respecto, el Gerente General de CMP, Francisco Carvajal, explicó que "cada célula tiene un desarrollo independiente del turno, desde la salida de su casa hasta el regreso. Logramos generar un transporte individual a través de los propios trabajadores, quienes se van rotando en el manejo de su vehículo. Hacen todo juntos, trayecto y trabajo, sin mezclarse con los otros grupos".
"Esto nos permite acotar cualquier riesgo y sobre todo que se protejan entre ellos, ya que es mucho más fácil que lo puedan hacer entre cinco o cuatro, que en un grupo de 50 personas. Y Efectivamente ha sido así, por ejemplo, han ido autogenerando señales para identificarse", complementó el ejecutivo.